El día de hoy la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación decidió resolver favorablemente los amparos a favor de los 12 presos de Atenco, detenidos en los hechos del 3 y 4 de mayo de 2006 en Texcoco y San Salvador Atenco, Estado de México.

El Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, participante de la campaña Libertad y Justicia para Atenco, se congratula por esta decisión. Los ministros consideraron que no se acreditan en el caso los elementos del tipo penal de secuestro equiparado, razón por la cual se ordenó la libertad inmediata de los 12 presos.

Los ministros de la Primera Sala han señalado que las pruebas empleadas para sancionarlos son ilegales o insuficientes. Se señaló incluso que el presente caso da la impresión de ser una forma maquillada de criminalización de la protesta social.

El Centro Prodh considera que la resolución de la Primera Sala constituye un paso necesario para garantizar el derecho a la protesta y al disenso. Estos derechos son elementos indispensables y útiles en toda sociedad que aspira a ser democrática. Su necesidad es más evidente en una sociedad injusta y desigual en la que los canales de diálogo entre ciudadanos y autoridades son ineficientes.

Ninguna consideración justifica la restricción de las libertades fundamentales que constituyen la razón de la actividad política. El ejercicio de estas libertades adquiere relevancia en el momento presente cuando las autoridades oponen en la práctica elementos como seguridad y derechos humanos y pretenden silenciar las voces críticas y disidentes.

Ante la persistencia de la impunidad y la pretensión de evitar la expresión de las legítimas inconformidades mediante llamados a la unidad, la decisión de la Primera Sala constituye un avance hacia el ejercicio de los derechos humanos en México.